La historia del Archiginnasio de Bolonia
El Archiginnasio de Bolonia es uno de los palacios más significativos de la ciudad: situado en el corazón del centro histórico, fue sede de la antigua Universidad y es ahora sede de la Biblioteca Municipal del Archiginnasio. ¿Sabes cuál es su historia?
EL PALACIO
La construcción del Archiginnasio data del siglo XVI, cuando el área de Piazza Maggiore fue drásticamente restaurada por voluntad papal, en los mismos años en que se construyó también la fuente de Neptuno. La realización fue encargada por el Papa Pío IV por medio del Cardenal Legado Carlo Borromeo y su vice Pier Donato Cesi, que asignaron el proyecto a Antonio Morandi (llamado el Terribilia), quien terminó el trabajo de construcción entre 1562 y 1563. El objetivo del proyecto era la realización de un lugar unitario donde llevar a cabo las enseñanzas universitarias relativas a las diferentes disciplinas, antes dispersas entre diferentes sedes y lugares.
El Archiginnasio siguió siendo sede del Studium boloñés desde el año de su inauguración (1563) hasta el 1803.
El Archiginnasio de Bologna está estructurado en dos plantas, con un porche delantero y el patio central de doble orden de logias. En el centro del patio, frente a la entrada, se encuentra la "Capilla de Santa María de los Búlgaros", que debe su nombre a una iglesia que se encontraba en la "curia búlgara", es decir en las casas del célebre jurista búlgaro (siglo XII).
Entre las principales emergencias históricas se encuentra el teatro anatómico (que fue construido según el proyecto de Antonio Levanti en 1637). Esta era una sala dedicada al estudio de la anatomía en forma de anfiteatro, construida en madera de abeto con techo artesonado, y decorada con estatuas, restaurada en la segunda posguerra después de que los bombardeos estadounidenses de 1944 la dañaron fuertemente.
La cátedra, donde se sentaba el profesor, está coronada por un dosel sostenido por dos estatuas de hombres desnudos y privados de piel, llamados "los desollados", obra del siglo XVIII de Hércules Lelli. Las numerosas estatuas que decoran las paredes representan a médicos de la antigüedad y de la contemporaneidad, en busto si se consideran figuras menores, de cuerpo entero si se consideran eminentes luminarias. Las dos estatuas principales, a la derecha de la entrada, representan a Hipócrates y Galeno, espectivamente el médico griego más importante y el médico romano más importante. Una estatua interesante, en la pared opuesta a la cátedra, representa a un médico que sostiene en la mano una nariz: se trata del boloñés Gaspare Tagliacozzi, considerado el precursor de la rinoplastia.
En la planta superior del palacio se encuentran también las antiguas salas de estudio de los Legistas (derecho civil y derecho canónico) y de los Artistas (filosofía, medicina, matemáticas, ciencias físicas y naturales). Las respectivas aulas magnas son la Sala del Stabat Mater y la Sala de Lectura de la actual Biblioteca Municipal.
La Sala del Stabat Mater fue llamada así en memoria de la primera ejecución nacional de la homónima obra de Gioachino Rossini, celebrada el 18 de marzo de 1842, con la dirección de Gaetano Donizetti. Tanto los legisladores como los artistas tenían diez aulas, pero las de los legisladores estaban dispuestas a lo largo del pasillo principal.
Como testimonio de la larga historia universitaria del edificio se ha mantenido el complejo heráldico mural más grande del mundo, compuesto actualmente por unos 6000 (originalmente más de 7000) escudos de estudiantes e inscripciones en honor de los profesores. El complejo afortunadamente se salvó de la destrucción ordenada por el gobierno republicano en 1797 y los bombardeos de la Segunda Guerra Mundial.
El edificio cesó su función universitaria en 1803. Desde 1838 es sede de la Biblioteca Comunal del Archiginnasio, la más grande de Emilia-Romaña, que conserva importantes textos en las disciplinas históricas, filosóficas, políticas, literarias, artísticas y bibliografíca, màs una sección desarrollada dedicada a la cultura boloñesa. Entre otras cosas, la biblioteca conserva alrededor de 35.000 manuscritos e incunables.
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